Históricamente las pandemias han producido descalabros económicos, han afectado gravemente la salud de la población mundial y además han producido notables modificaciones en las costumbres gregarias de los humanos. En nuestro país, a partir del 20 de marzo de 2020 irrumpió el coronavirus en nuestras vidas.
De repente se instaló la frase “Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio” que nos obligaba a permanecer en nuestras casas con el mínimo contacto social posible, ya que el otro, de ser nuestro hermano, amigo, amante, compañero de ruta, pasaba a ser un peligro.
El cuerpo del otro antes habitado por nuestros amigos y amores pasaba a ser un cuerpo peligroso que podía contagiarnos y del que había que estar lejos.