Mi práctica se orienta hacia quienes sufren padecimientos emocionales que dificultan el disfrute de la vida. La clínica que ejerzo aborda el campo de las neurosis y de las enfermedades psicosomáticas, ofreciendo una respuesta a las dificultades propias de la sociedad actual.
¿Cómo trabajo?
Se trata de trabajar con el enfermo trasladándolo desde el campo de la necesidad, con sus características de exclusividad y perentoriedad, al campo del deseo, que conlleva el vacío de saberse carente y en tanto carente, deseante (“solo se desea aquello de lo que se es falto” nos dice Sócrates en “El banquete” de Platón).
Mi formación psicoanalítica, dentro de un enfoque dinámico y activo, apunta a ayudar al paciente a solucionar de la manera más rápida posible su padecimiento.
Los tratamientos están dirigidos a adolescentes, adultos, gerontes y parejas y se adecuan a las necesidades del paciente.